sábado, 3 de septiembre de 2011

Relatos eróticos

Hace años escribí algunos relatos, tienen una gran proporción de verdad, de anécdoticos, y un poco, sólo un toque de fantasía.

En Relatos Marqueze hay algunos. De cuando me tiré un trailero casado, un macho peludo, de cómo descubrí sexo en los cines porno, y de cómo me encanta romperle el culo a un macho. Espero sus comentarios, y que compartan sus experiencias.

1. Macho peludo, atrapado en el vapor
Era muy estimulante ver sus ojos excitados y llenos de lágrimas originadas por las arcadas de su garganta, que se resistía a tremendo tamaño de pene. Ver como esos labios succionaban y a veces sólo acompañaban el paso de mi pene a esa húmeda, caliente y resbaladiza cavidad de macho. Sentir con mis manos su barba cerrada mientras mamaba con fuerza y desesperación mi tranca.

2. Revienta culos.

Sus manos se aferraron a las cobijas de la cama, su boca mordió la almohada, su frente chorreaba enormes gotas de sudor, apretó al máximo sus ojos, tenso más cada músculo de su cuerpo, eso me prendía. Y lentamente se la saqué un poco, nuevamente con lentitud se la enterré y él con sus dientes enterrados en la almohada, respiraba con dificultad, se la metí completa, y alcanzó a balbucear…dale con fuerza, “reviéntame el culo papacito”.
3. Le rompí el culo a un trailero casado

Le puse la cabezona en su hoyito mojado por mi saliva y un poco de lubricante que siempre cargo entre mis cosas y le empuje la cabeza, dio un respingo, intentó incorporarse, pero con mi peso y fuerza lo empuje hacia abajo, desesperado intentó separarme con sus manos, lo dominé y se la dejé ir hasta la mitad, se retorció de dolor y aproveché para dejarle ir el resto.
4. Descubrí sexo en cines porno de México
Cuando se bajó a mamar, era capaz de engullirse completo todo mi pene y mamarlo con fuerza, realmente me sorprendió que se metiera mis casi 20cm, sentir el fondo de su boca, su garganta, al chocar mi cabezota dentro de esa cavidad y su bigote en la base de mi pene fue super excitante. Realmente fue tan delicioso que en ocasiones posteriores, cuando me la mamaban otros tipos, les empujaba mi verga con fuerza para que se la tragaran toda, pero no cualquiera podía, les daban arcadas y yo les sostenía con firmeza la cabeza, los lastimaba en serio, pero querían aguantar mis embates, querían una verga así de buena, resistían lo más que podían, como acto reflejo estornudaban con fuerza para no ahogarse, se les salían las lagrimas y los mocos por ojos y nariz respectivamente, muchos se levantaban y se iban, y yo pensaba “si no puede chuparla completa no se la merece”.

5 comentarios:

Anónimo dijo...

Muy buenos los relatos en realidad. ¿En qué vapor es donde sucedieron estas historias?

Editor en Jefe dijo...

En los San Cristóbal, te invito a revisar la entrada publicada en este blog sobre esos vapores.

Anónimo dijo...

Hola, pregunto si habria una forma de que me dieras verga?

Anónimo dijo...

que rico se ve el editor. Yo igual me animaria a que me diera verga te dejo mi nick en el manhunt. lindavista 33

Unknown dijo...

Puedes presentarme al trailero te dejo mi fon 7225128810